El escultor bielorruso, Viktar Kopach, se mostró “sorprendido” por la gran convocatoria popular que tiene la Bienal Internacional de Escultura del Chaco. Dijo que el concurso es una “muy buena idea” y destacó la gran diversidad de técnicas que muestran sus colegas.
“Es una buena exhibición y una muy buena idea lo de este concurso porque todos tenemos diferentes formas de trabajar y somos de diferentes países. Y todos estamos juntos haciendo una pieza de arte”, sostuvo Kopach en un alto en su labor diaria.
El artista contó que conoce hace tiempo la Bienal del Chaco y comentó que “varias veces envié mi propuesta y ahora estoy aquí”. “La verdad que me sorprendí al llegar porque hay muchísima gente que le gusta el arte. Es muy bueno estar aquí con los amigos y hacer un trabajo más en esta hermosa ciudad”, dijo.
Entre el cielo y la tierra
La obra en que se encuentra trabajando Kopach se llama “Entre el cielo y la tierra”. Al presentar su proyecto, explicó que “el agua es un símbolo de la vida. En mi trabajo hago mención de las diferentes formas físicas del agua y del valor emocional que esto contiene. Las aguas subterráneas, los lagos, los glaciares, los océanos, las nubes y la lluvia circulan etenamente. El agua puede cambiar de estado, de líquido a vapor y también al hielo, en varios lugares durante este proceso del agua”.
“Pretendo crear un símbolo para este fenómeno eterno, pero no inequívoco. Hablo de dualismo en este proceso. De la vida humana que nos rememora siempre el pasado. Es la misma circulación. Quien nos muestra el viento, nos lleva a la tormenta”, explicó.